Desde la invención del microondas, allá por 1945, ha habido un debate constante sobre si es seguro o no meter metal en el microondas. ¿Se trata de un peligro real o simplemente un mito que ha perdurado en el tiempo?
En este artículo, desentrañaremos la verdad detrás de esta cuestión para que puedas usar tu microondas de forma correcta y segura.
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¿Qué sucede cuando metes metal en el microondas?
Antes de abordar si es seguro o no introducir metal en el interior del microondas, es importante entender qué ocurre cuando esto sucede:
Cuando introducimos metal en el microondas, se desencadena un fenómeno conocido como «arco de microondas».
Este fenómeno ocurre debido a la manera en que las microondas interactúan con el metal y puede tener consecuencias peligrosas como verás a continuación.
Reflexión de las microondas
Sabemos que la manera en cómo funciona un microondas para calentar la comida es a través de la generación de ondas electromagnéticas.
Cuando estas ondas entran en contacto con el metal, en lugar de ser absorbidas como ocurre con los alimentos, son reflejadas de vuelta como si de un espejo se tratase. Esta reflexión es la que provoca la formación de chispas.
Generación de calor intenso
Las chispas resultantes de dicha reflexión pueden generar un calor intenso en puntos específicos capaz de llegar a provocar que el metal se caliente rápidamente y, en algunos casos, incluso se funda.
Riesgo de incendio y daños en el microondas
Este intenso calor puede ser suficiente para prender materiales inflamables como plástico, o incluso materiales combustibles presentes en el interior del microondas provocándose así daños en el propio electrodoméstico.
Medidas de seguridad
Para evitar este tipo de situaciones peligrosas, es fundamental seguir las instrucciones del fabricante del microondas y evitar introducir objetos metálicos en su interior.
Si por accidente un objeto metálico ha quedado dentro del microondas y ves que se empiezan a producir chispas, es crucial desconectar rápidamente el aparato, ya sea a través de sus propios controles o directamente de su enchufe.
Posteriormente, deja la puerta abierta unos 10 minutos para que se enfríe el metal contenido en su interior y retíralo con cuidado utilizando guantes protectores como los del horno.
Por lo tanto, ¿Es seguro meter metal en el microondas?
La respuesta corta es no. No es seguro meter metal en el microondas debido al riesgo de incendio y daños en el electrodoméstico se pueden ocasionar.
La mayoría de los manuales de instrucciones de los microondas advierten explícitamente contra esta práctica. Además, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) también desaconsejan encarecidamente esta acción.
Alternativas seguras para calentar alimentos con metal
Si necesitas calentar alimentos que contienen envolturas o recipientes metálicos, es importante transferirlos a un recipiente apto para microondas antes de meterlos a calentar. Opta por platos de vidrio o cerámica que sean seguros para su uso en microondas.
En relación a esto, en el caso de que tengas que calentar comida contenida en un «taper» o fiambrera de plástico, asegúrate que el propio recipiente es apto para microondas, y que el plástico que usa es libre de BPA.
De lo contrario, el propio calor generado puede hacer que partículas nocivas del plástico pasen al alimento, e incluso que el propio plástico se derrita, con el consiguiente accidente que puede provocar.
Conclusiones
En conclusión, no es seguro meter metal en el microondas, es una práctica peligrosa que puede provocar incendios y daños en el electrodoméstico.
Es importante revisar el tipo de recipiente que estamos usando para contener la comida y optar por alternativas seguras como recipientes de vidrio, cerámica o incluso fiambreras de plástico aptas para el microondas.